Hoy tenemos que sufrir males que no tienen nombre, pero esto a nadies lo asombre porque ansina es el pastel, y tiene que dar el hombre mas güeltas que un carretel.
En la güeya del querer no hay animal que se pierda las mujeres no son lerdas, y todo gaucho es dotor si pa cantarle al amor tiene que templar las cuerdas.
Yo nunca me he de entregar a los brazos de la muerte; arrastro mi triste suerte paso a paso y como pueda, que donde el débil se queda se suele escapar el juerte.